Santiago Dìez

DEDICATORIA

Hay veces que uno quisiera expresar tantas cosas que las palabras o se quedan cortas o bien no surgen como debieran. Pero hay algo fundamental en la vida del ser humano y son los recuerdos que prevalecen siempre en la memoria. Esos recuerdos me hacen volver mucho atràs en el tiempo, cuando yo no sabìa ni andar, y me veo sentado en un silloncito, mas bien una silla alta de patas largas y arrimado a la mesa sin querer comer, y te veo allì haciendo lo imposible para que me tragara alguna que otra cucharada de no se muy bien que potingue o comida, asì un dìa tras otro, soportando mis berrinches y seguro estoy que soportando tambièn alguna que otra pedorreta que te ponìa perdido. Mucho ha pasado desde entonces.

Tù ahora tienes el pelo blanco, totalmente blanco y yo ... fìjate lo que son las cosas... casi no tengo pelo, y sin embargo cuando nos juntamos ocasionalmente siempre recordamos aquellos viejos tiempos y nos aflora una sonrisa.

Durante estos años recuerdo que en los pocos ratos que tenìas libre los dedicabas a pintar, eso te encantaba y a fè que no es peloteo de sobrino he de decir que lo hacìas magnìficamente, y aun hoy a pesar de la edad y del desgaste del tiempo sigues hacièndolo perfecto. Hiciste muchos cuadros por encargo, e hiciste tambièn muchos amigos con ello, algunos grandes dibujantes y acuarelistas y a mì me metiste el gusanillo de la pintura en el cuerpo. Y hoy esos recuerdos tuyos y esta aficiòn a la pintura me hacen sentir bien.

Ni tu ni yo hemos cursado estudios de bellas artes, hacemos lo que nos sale del alma y lo plasmamos en los lienzos, no sè si los crìticos y los entendidos en arte veràn nuestros trabajos desde el punto de vista de lo bien hecho, pero, tìo, lo que sì es cierto es que ambos lo hacemos por puro placer, sin que medie el interès econòmico y eso nos hace sentir en al alma algo especial difìcil de describir.

Hoy y gracias a la tecnologìa puedo poner en esta humilde pàgina una pequeña exposiciòn de tus trabajos para que la conozca el mundo, y para que desde aquì puedan saber que Santiago Dìez, mi tìo, ademàs de ser un gran pintor, es tambièn un gran hombre.

Gracias tìo por todos estos años.



Fernando Muñoz

TRABAJOS DE SANTIAGO DIEZ